En ese invento del demonio llamado Facebook me etiquetaron en un reto consistente en hacer «una semana de rock» poniendo una canción cada día. Y me etiquetaron tanto en mi perfil personal como en una de las páginas que administro. Total, que decidí no poner los mismos temas en una y en otra, y así acabé con dos semanas de rock, 14 canciones que dan para una minilista de reproducción. A disfrutarla: