Resaquilla después de ver ayer un conciertazo de Charles Bradley en Compostela, pero resaquilla que no nos hará olvidar el Bandcamp de la Quincena. Esta vez recorreremos fragas y carballeiras de la mano del viaje musical que nos ofrecen Sangre de Muérdago.
Se trata de una banda gallego-alemana, cuyo núcleo está formado por Pablo C. Ursusson, Emma Skemp y Georg Börner. El primero es el vocalista principal, compositor de la mayor parte de la música y las letras y guitarrista. La segunda se encarga de la flauta y de la voz femenina, mientras que el tercero toca la viola, el dulcimer y la nyckelharpa (ese instrumento escandinavo que muchos descubrimos gracias a los enormes y nunca suficientemente ponderados Hedningarna). Cuentan para este disco con un segundo guitarrista en varios temas, acreditado como Bubu en los créditos del disco.
A pesar de que los miembros principales de la banda sean gente proveniente del mundo del black metal y el crust lo que este trabajo, publicado hace ya un año, nos ofrece es una buena colección de temas acústicos de impecable belleza, ejecutados con brillante precisión pero sin caer el virtuosismos innecesarios y con un trabajo de armonía vocal tremendamente cuidado. No hablamos de música elaborada en serie, como en un McDonalds de hit-singles, sino de una pieza deliciosa donde los ingredientes de toda la vida de la mejor calidad se cuecen a fuego lento.
Hay una gran mezcla de influencias en su estilo, que suele etiquetarse genéricamente como neofolk. A mi la nyckelharpa me trae siempre a la cabeza a Hedningarna (aunque siempre lo hace porque asocio a ese grupo con ese sonido) aunque también creo que el aire de misticismo que rodea a la música de esta banda tiene algo que ver con los finlandeses, y con los primeros trabajos de Sol Invictus antes de que estos se dieran la mano con la psicodelia de los 60 en los últimos trabajos. Y no podemos dejarnos a los renovadores del folk gallego de finales de los 70: Fuxan os Ventos, Xocaloma y Milladoiro, y los posteriores Luar na Lubre, Matto Congrio o Berrogüeto. Y en algunos puntos me viene un regusto al primer Alan Stivell o de los inicios de los Planxty.
O Camiño das mans Valeiras es su tercer largo, aunque cuentan con algunos EP y splits más, y con un trabajo titulado Lembranzas dende o Lado Salvaxe en el que regrabaron algunas de sus primeras piezas.
Íntimo, introspectivo, bello, oculto, mágico. Esta banda lleva casi una década ofreciéndonos una cuidada producción musical, piezas delicadas de elaborada orfebrería musical. Si te va el folk debería echarles un oído. O si simplemente quieres hacer caso a ese consejo que de vez en cuando nos daba Ramón Trecet: «Buscad la belleza, es lo único que merece la pena de este mundo«.