Lo twitteaba esta tarde: No podré ver el España-Alemania, una pena porque marcará el final de una era, ya sea la de Nowitzki o la de la generación Juniors de oro. Y es que este era el último Eurobasket de Dirk Nowitzki con la selección alemana. Tras el primer partido frente a Islandia di las claves que me hacían sospechar que la despedida no iba a ser todo lo gloriosa que merecería una leyenda de su calibre. Pero en todo caso, toca despedir a uno de los grande del baloncesto europeo de las últimas décadas con un aplauso y con jugadones en el recuerdo. Y todavía le disfrutaremos un año o dos más en la NBA, en esos Mavericks donde ha permanecido toda su carrera americana.