Aunque Kim Dotcom no es un personaje al tenga especial cariño hay que destacar que la llegada de Mega es una de las noticias tecnológicas de 2013.
Y es que por mal que me caiga el tío también pienso que el cierre de Megaupload fue un atropello a la libertad para la distribución de contenidos on-line. Una guerra sobre el control de contenidos de la que ya he hablado y que no viene al caso en esta entrada.
Siguiendo con Mega, el primer día ha sido todo un éxito: 250000 usuarios en pocas horas, más de un millón registrados el primer día y los servidores casi colapsados. Y eso que muchos no tienen claro el funcionamiento del nuevo servicio. Y es que Mega no es Megaupload, el nuevo proyecto de Dotcom tiene más que ver con los servicios de almacenamiento cloud como Drive o Dropbox que con su antigua página. Usarla para compartir archivos de forma masiva se tornará más complejo, dado que toda la información estará encriptada, y sólo el usuario tendrá la contraseña. Con esto no sólo consigue dar mayor seguridad a su servicio, sino que también logra descargase de responsabilidades, ya que de esta forma Mega nunca sabe qué ha almacenado el usuario. Una inteligente jugada para evitar problemas con la ley estadounidense como los que tuvo Megaupload.
El problema es que para compartir material el que lo haga deberá publicar su contraseña. Todavía no me he hecho cuenta para probar el servicio, pero por lo que he leído ofrecen 50 GB para los usuarios con cuenta gratuita, por lo que parece una opción interesante para competir con los servicios de almacenamiento más populares.