Cinco tebeos estatales inquietantes, para Halloween.

Llámalo Samaín, llámalo Halloween, llámalo Difuntos y Todos los Santos, llámalo spooky season. Puedes llamarlo como quieras, pero lo que está claro es que estos días de otoño, de hojas marrones caídas, de grises cielos lluviosos, de castañas asadas y de cremita de calabaza con nueces son también la temporada de consumir ficciones terroríficas o inquietantes. Lo de la pasión por el terror y lo malrollero me viene de mi abuela Lila, que siempre decía que a ella le gustaban las películas «de miedo o de crímenes«, ella me descubrió a Edgar Alan Poe y con ella veía de adolescente todos los lunes CSI, en los tiempos en los que había que tragarse anuncios de Telecinco para disfrutar de los crímenes más intrigantes de Las Vegas, aunque siempre me insistía en que en televisión nada superaba a las Historias Para No Dormir del gran Chicho.

Viñeta del Drácula de Fernando Fernández.
Viñeta de Drácula de Fernando Fernández

Esta semana seguro que corren por los internetes cientos de artículos recomendando películas escalofriantes para la noche del 31 de octubre, pero yo aquí he venido a hablar de tebeazos y de otros medios que se encarguen otros. El terror es un género que me ha traído muchas horas de diversión a través de viñetas inolvidables, he sido seguidor obsesivo de colecciones como The Tomb of Dracula de Marv Wolfman y Gene Colan, el Hellboy de Mike Mignola y todo su universo de ficción o los viejos clásicos de EC de los 50 como Tales from the Crypt o The Vault of Horror, además de sus herederas setenteras Creepy e Eerie. Títulos todos 100% recomendables, pero en esta ocasión prefiero centrarme en el tebeo estatal, dado que uno de los problemas de la industria del cómic en España es la falta de lectores… y si hablamos de tebeo de género, más desierto pinta todavía el panorama. Esta es mi inquietante selección para este año.

Portada del álbum Phantasmagoria, de El Torres y Joe Bocardo.
  • Phantasmagoria es una pieza de terror clásico que nos lleva a un Londres victoriano en el que encontramos cultistas, brujos y fantasmas, atmósferas inquietantes, demonios imparables, horrores primigenios y secuencias de acción magníficamente dibujadas por Joe Bocardo, con guión de El Torres, seguramente el guionista más importante en el ámbito del terror en España. Una dupla creativa que también ha firmado esas dos magníficas y sentidas cartas de amor a la obra de Robert E. Howard que son Sangre Bárbara y El Puritano, y que en el campo del terror se maneja tan bien como en el de las historias de espada y brujería. Creo que en papel está ahora mismo agotado, pero todavía podéis haceros con una copia en digital en la web de la editorial Karras, para ir calmando el ansia hasta que lo reimpriman.
  • Drácula, la mítica adaptación de Fernando Fernández de la que ya hablé en otra entrada (en la que también reseñaba el fantástico Villanueva de Javi de Castro, joyita folk horror que no está en esta selección pero que es tan bueno como cualquiera de los aquí citados y que os recomiendo de nuevo encarecidamente), un clásico del cómic español de los años 80 que se publicó por capítulos en la revista Creepy entre 1982 y 1983. Una versión fiel a la novela de Bram Stoker que solo prescinde de alguna subtrama pero que se centra en lo esencial, y cuya estética bebe de los clásicos de la Hammer, destacando por su dibujo de estilo realista y su artístico color al óleo. Fue editada en tomo por Toutain en los 80, reeditada por Glènat en 2004 y actualmente reeditada por cARTEm en una edición muy cuidada.
  • Grito Nocturno es la obra ganadora del último Premio Nacional de Cómic, guionizada y dibujada por Borja González. Una historia que oscila entre el realismo mágico y el terror romántico, que entre sus tramas nos desliza muchas reflexiones sobre la soledad y el autoconocimiento y que nos presenta un dibujo impresionante, con unas atmósferas e iluminaciones dignas del maestro Mignola pero a su vez con un estilo muy reconocible y lleno de personalidad. Aunque forma parte de una trilogía, junto a The Black Holes y El Pájaro y la Serpiente, puede leerse de forma autónoma… claro que ¿por qué leer solo uno pudiendo disfrutar de tres tebeos excepcionales?
  • La Isla, de Mayte Alvarado, no es exactamente un tebeo de terror, pero sí que lo veo lo bastante inquietante para incluirlo en una selección halloweenesca, al menos es la sensación que me ha dejado en muchos momentos. Se trata de una obra melancólica, poética, onírica, romántica, como si un cuadro de Caspar David Friedrich se hubiese hecho tebeo, un cómic casi sin texto que se apoya en un dibujo excepcional, con una paleta de colores muy bien utilizada para introducirnos en una historia extremadamente visual sobre la soledad y la pérdida. En 2022 la Asociación de Críticos y Divulgadores de Cómic otorgó el premio de Autora Emergente a Mayte Alvarado por esta obra.
  • El extraño caso del Doctor Jekyll y Míster Hyde, otra adaptación de un clásico del terror, en este caso a cargo de la que yo llamo «dupla maravilla» del tebeo español: Santiago García y Javier Olivares. El primero es seguramente el guionista más versátil del estado, que lo mismo te crea un superhéroe cruce del Capitán América con Roberto Alcázar en la genial saga ¡García! como te hace una novela gráfica sobre fútbol, y en medio te puede redefinir la guerra de Troya o renovar el relato de Beowulf. En cuanto al segundo, es uno de los dibujantes más personales y excepcionales del panorama tebeil ibérico, con ese cuidado estilo de inspiración cubista y esa habilidad para componer páginas con total maestría. En este caso se trata de una obra corta, un álbum de solo 30 páginas en el que van al grano para contarnos el clásico relato de Stevenson con una tremenda agilidad que consigue el dibujo de Olivares, con unas composiciones a doble página que recuerdan el tremendo Atmósfera Cero de Steranko.
Un par de páginas de La Isla, de Mayte Alvarado
La Isla, de Mayte Alvarado.




Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.